miércoles, 19 de octubre de 2011

La elección de no votar


Por Giuliana Formía y Martín Zubiaur

“Los anarquistas permanecen, como siempre, adversarios al parlamentarismo y de la táctica parlamentaria”, escribió Errico Malatesta al medio italiano Messaggero, el 7 de febrero de 1897. Una ideología que rechaza el voto y la democracia representativa que perdura hasta nuestros días.

Jorge, integrante de la Federación Libertaria Argentina (FLA) explica que el anarquismo es un pensamiento que no busca una organización piramidal, sino el consenso, una democracia directa más que representativa.

La FLA es una agrupación anarquista, que lleva setenta y seis años funcionando en Argentina, y entre las principales actividades, se encuentra la revista y editorial Reconstruir, el diario Acción Libertaria, como también su biblioteca.

Este libertario afirma que no les interesa realizar un marketing sobre la decisión de no votar, ya que la consideran una decisión personal.

“Hay mucha inmadurez en la política. Se espera a que el otro resuelva todo. Esto no es lo que combatimos, nosotros buscamos que el individuo tenga una conciencia crítica y reflexiva, que sea libre, con respeto y amor hacia el resto”, agrega.

Esta opinión es compartida por Facundo Malvenido, participante activo de la Federación Obrera Regional Argentina (FORA). “Un gobierno, sea de la tendencia que sea, no resuelve los problemas que tiene cada uno como individuo. Por eso lo que buscamos no es una votación, sino un consenso. En el primero, no hay debate serio sobre cada posición, no hay acuerdo, sino una imposición. En el consenso, vos escuchas la opinión del otro y se llega a una solución real”, explica.

La FORA nació en 1901 y, a pesar de las persecuciones políticas y militares que sufrieron a lo largo del sigo XX, a partir de los 80 se retomaron las banderas de solidaridad obrera y libertad que caracterizan a este movimiento. Luego de la crisis del 2001, se refunda la Sociedad de Oficios Varios de Capital y en el país. Hoy la Federación sigue existiendo, dando Congresos y charlas, y la publicación del periódico bimestral, Organización obrera.

Facundo, con 22 años, asevera que el voto no motiva a un cambio social. “Elegir un político es algo muy cómodo, pero no soluciona nada, es una gran falacia el pensar que se puede cambiar algo en las urnas”

Por su parte, Carlos Splavsky - poeta asambleario- hace 28 años que mantiene una ideología anarquista. “Me fui dando cuenta que no era un buen sistema, ya que no da canal para el cambio”, asegura. Quien además agrega que a la sociedad le costó muchos años que se decepcionara de la política, y que hoy en día existe una generación nueva que “no quiere creer más en las mentiras”.


Redactores: Formía Giuliana y Zubiaur Martín

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